Una ráfaga de mensajes Whatsapp y el grupo queda formado.
Pablo, viejo compañero de innumerables correrías, Iñigo que se viene desde
Madrid y lo recogeremos en Zaragoza y Dani, que algunos lo conoceréis por su
blog, Per dalt i per baix.blogspot.com. Así pues grupo formado y objetivo decidido,
La Peña Collarada por el Corredor noroeste o de los Militares; pero como
veremos en adelante, improvisaremos sobre la marcha.
Salimos del aparcamiento, tras cruzar el puente. |
Aparecen a la vista, Los Campaniles. |
Pequeño refugio, antes de llegar a la presa. |
El denominado Corredor noroeste; algo escaso de nieve. |
Atravesando el puente de los peregrinos, se inician dos
senderos, uno el denominado de la Solana y otro de la Besera, que llevan hasta
el Circo de Ip. Tomamos el de la Solana, que al poco cruza el fragoso torrente
desplomado en sucesivas cascadas. El trazado del Canfranero, también lo cruza y
su recuerdo me retrotrae 23 años atrás…
La senda decididamente empieza a ganar cota entre un tupido
bosqueral; cuando salimos a un claro, la vista acompaña la recia muralla que
culmina en la niña bonita la Collarada, son los Campaniles. El bosque se queda
atrás; al paso una arroyada nacida bajo las cresta de los Picos de la
Tronquera, se desliza verticalmente al fondo del barranco. Una rústica cabaña
pastoril sale al paso, lugar donde ya nos llegan los ecos del circo.
Alcanzamos el muro de la presa del ibón de Ip, bajo él se
asienta el refugio que sirve de base para las ascensiones.
Llegando a la presa de Ip. |
Sobre el muro de la presa, mirando hacia Peña Nebera. |
Una parte del magnífico circo. |
Desde el otro extremo, la aplastada Pala de Ip 2.778 m |
CIRCO DE IP
La definición de circo, en sentido montañero se entiende; se muestra aquí en toda su magnitud,un elipse que en ambos extremos levanta
las dos grandes montañas del valle, Pala de Ip 2.278 y Collarada 2.886,
salpicadas de la estilizada Punta Escarra 2.760 y Bucuesa 2.763.
El incesante viento se ha mostrado feroz llegando al
refugio, las continuas embestidas hacen perder por momentos el equilibrio.
Cobijados dentro del edificio, comemos y debatimos la jugada. Por lo pronto el
corredor noroeste o de los militares, queda descartado, ante la falta de nieva
suficiente que haga atractiva su ascensión. También decidimos dejar para mañana
el ascenso a la Peña Collarada. Salimos a pasear por la presa y su aliviadero,
nos sentamos en unas rocas, pensamos…, Pablo lanza una piedra al aire y los
demás la recogemos ¡en marcha, pués! Eólo se ha echado la siesta y tenemos
margen de luz suficiente.
En marcha hacia la perla. |
Cercano a la canal de acceso del Collado de Ip. |
Iñigo llegando al collado. |
Excelente vista desde el collado, con Punta Escarra en el centro de la imagen. |
Atravesada la presa, se inicia se inicia un flanqueo
bordeando el ibón y tomamos un cambio de dirección hacia el suroeste; enlazando
pendientes nevadas, nos acercamos a un formidable bastión rocoso que divide las
dos canales de acceso al collado de Ip; elegimos el de la derecha. Metidos en
el embudo que forma, el viento vuela por encima de nuestras cabezas, pero
alcanzado el collado y en la otra vertiente es soportable. Mientras comemos
algo, Iñigo nos dice que prefiere reservar fuerza para el descenso y nos
esperara aquí.
Últimos metros. Al fondo alargada y chata, la Peña Oroel. |
Vértice cimero 2886 m. |
Dos colosos de los Pirineos. |
La quebrada que forman Los Campaniles. |
Cómodamente alcanzamos la perla del collar; ni una pluma de
nube que adorne el cielo extremadamente azul, la claridad de las alturas nos
permite reconocer grandes macizos y reputadas montañas. Emergiendo como un
castillo medieval, el imponente Midi d’Ossou, no lejos de él y plantándole cara
con sus atrevidas formas, el formidable Pico Palas, pero mirándolos por encima
de la testuz uno de los tresmiles con más personalidad de toda la cadena, el
mitológico Balaitous; algo más retirado queda el salvaje señor del Pirineo…Iniciando
el descenso, es inevitable no echarle una visión al mirador de Jaca, la Peña
Oroel.
Iniciando el descenso desde el collado. |
Preciosa vista del circo y del ibón. |
El vasto contrafuerte este de la Collarada. |
De vuelta al collado y con los crampones puestos enfilamos la canal y sus campas
nevadas que nos facilitan la progresión a buen ritmo. El verde de las aguas del
ibón cada vez está más cerca, mientras observamos cómo se estiran las tardes de
finales de mayo.
Arriba a la izquierda, la agujereada Peña Nebera. |
Flanqueando el embalse. |
Regresando al refugio, con luz más que suficiente. |
Avituallamiento para hambrientos pirenaicos. |
El último sol se acomoda por los Mallos de Lecherín. |
Llegamos al refugio y sacamos una mesa al exterior y
empezamos a dar cuenta de las viandas con cerveza y vino, que Pablo ha tenido
el detalle de portear. Momentos de risas y cierto sosiego, coloreados por el
disco solar que despacito se oculta tras los Mallos de Lecherín.
Al día siguiente bajamos por la senda de la Besera, que
cuando se introduce en el bosque, nos ofrece unos túneles de frondosa vegetación.
Llegamos satisfechos al término de la excursión. Una vez más el Pirineo nos ha
regalado sus bellos rincones.
Vista del refugio desde la presa. |
Una mirada furtiva. |
Difuminada cascada que cae de lo alto de la Cresta de la Tronquera. |
SISTEMA: Pirenaico
MACIZO: de Ip
INICIO: Canfranc pueblo
LLEGADA: Idem
DISTANCIA: 19,3 Km
HORARIO: de 10 a 12 horas
DIFICULTAD: Fácil. La parte más empinada del ascenso es
coronar es remontar la canal hasta el Collado de Ip. Con nieve dura,
imprescindibles los crampones y el piolet.Si se hace en el día, tiene el
añadido del desnivel a superar.
DESNIVEL: 1850 m.+
CARTOGRAFÍA: Editorial Pirineo Valle del Aragón E: 1:40.000
ACCESO: Desde las afueras del pueblo en dirección Canfranc-
estación, cruzamos un puente sobre el río, a la izquierda existe una explanada
donde aparcar. Camino señalizado.
OBSEVACIONES: Estupenda ruta que recorre en su totalidad en
cerrado Valle de Ip y culmina ascendiendo al coloso de la zona. Si se realiza
en el día, tiene el añadido del desnivel a superar. Si la partimos en dos días,
pernoctando en el refugio libre de la presa, se hace más llevadera, con el
añadido de pasar la noche en un lugar muy bonito.
Una gozada volver a rememorar lo que fue un fin de semana repleto de buenos momentos, por muchos más como este.
ResponderEliminarGran narración como de costumbre Javi.
Pim, pam...salut!!!
¡Hola Javi! Bonita aventura la que tuvisteis ocasión de disfrutar los tres en los Pirineos. Rutas con encanto, que jamás se olvidan.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yeeepa, Javi!!. Que chulas las fotos!!!. Y la narrativa de la crónica...muy buena!!. A veces estas decisiones, de vamos??, y Yá....funcionan muy bien. Un desnivelazo propio de grandes andarines y montañeros..
ResponderEliminarDestaco la foto del atardecer sobre los Mallos de Lecherín, es magnífica!!.
Salud y un abrazo!. Muy buenos recuerdos, si señor!!
Hola Javi
ResponderEliminarNo hay desperdicio en Pirineos, da igual por donde te metas, esta crónica tuya es otro claro ejemplo de ello...Muy buenas fotos!!!
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Javi.
ResponderEliminarSe me acrecienta sobremanera las ganas de escaparme a los Piris, viendo tu entrada. Se me hace más rara y bella aún, al veros tan solitarios, cuando los Pirineos en verano llevan un trasiego de gente importante.
Un saludo.
Hola Javi!!!
ResponderEliminarQue envidia sana que me dais viendoos realizar esas travesías en Pirineos.
Yo no estoy preparado para realizar estas ascensiones, pero a ver si en algún momento me animo y me pongo las pilas para ver si os puedo acompañar en algún momento.
Ya que estoy aprovecho para comentarte que para San Juan realizaré la ruta Teide 040 que va desde la Playa del Socorro a la cima del Teide haciendo noche en el refugio de Altavista. Aun estoy ultimando los detalles del viaje e intentando enredar a alguien para que me acompañe, cosa nada fácil... jajaja Al final seguramente la haré en solitario y autosuficiencia, así que a ver que tal me va...
A ver si nos vemos pronto.
Salud y montaña!!!